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LEY DE LA GRAVITACION UNIVERSAL ¿Simplemente una ley obsoleta?
Enviado por el día 9 de Enero de 2004 a las 12:56
LEY DE LA GRAVITACION UNIVERSAL ¿Simplemente una ley obsoleta?
Parece que en el año 2.004 vamos a presenciar una nueva carrera de dominio científico-político entre continentes y países, por conseguir ser los primeros en el control, investigación y conocimiento de Marte, exactamente igual, como “ayer” lo fue la falsa conquista cientifico-politica de la Luna. Al final como siempre todo quedará seguramente con el desmontaje de algún teatro improvisado, eso sí, después de que cada cual, jefes y sirvientes hayan terminado de sacar provecho mutuo de la escena.
El conocimiento es sinónimo de evolución, por eso cuando el conocimiento se utiliza como herramienta para mantener el tradicionalismo, el inmovilismo, la idiotez y el fanatismo de todo tipo, necesariamente ese conocimiento será y estará secuestrado.
Sirva esto de colofón o preámbulo para hablar de la Gravitación. Pues si de verdad queremos visitar la Luna o Marte o cualquier otro planeta, necesariamente debemos saber sus características y fundamental sus gravedades superficial y espacial. Y Vds. pueden decir ¿Pero es que no la conocemos ya con la famosa ley de Gravitación Universal? Debo de responder que no. Miren Vds., esta ley, la que dicen del Sr. Newton, publicada en 1666, resumiendo las ideas y fórmulas de otros que por diversos motivos fundamentalmente económicos, no pudieron publicar antes y asumida enteramente por la ciencia académica oficial, esta basada en tres ecuaciones matemáticas sobradamente de todos conocidas:
-la de la fuerza centrifuga del movimiento circular, de carácter mecánico (1.1) P = mV2/R,
-la de la fuerza en aceleración, de carácter gravitacional (1.2) P = mg
-la de la propia fuerza de atracción gravitacional, de su mismo de carácter (1.3) P = GMm/R2
De tal forma, que la fuerza o peso P, es P = mV2/R = mg = GMm/R2
De las (1.2) y (1.3) se deduce que: g = GM/R2 o lo que es lo mismo g = 4.18*G* R*d donde se relaciona la gravedad superficial g, con la constante gravitacional G, la densidad d, y el radio R, de un planeta o cuerpo. También que R12g1 = R22g2
De las (1.1) y (1.2) V2/R = g o lo que es lo mismo V12/g1R1 = V22/g2R2
De las (1.1) y (1.3) V12R1 = V22R2
Como vemos estas ecuaciones relacionan el peso, con las dimensiones, la masa, la gravedad superficial o espacial y la velocidad de traslación entre sí, y con la masa del Sol.
Con estas ecuaciones y dando valores obtenidos de las observaciones oportunas como el radio y distancia de los planetas a la Tierra y al Sol, la densidad y la velocidad de traslación de los mismos, se han obtenido todos los valores y datos de la gravedad de cualquier planeta.
Pero viendo estas ecuaciones, surge la primera pregunta ¿Son correctas y están bien deducidas estas ecuaciones? Pues miren Vds., la respuesta es que no son correctas, ni están suficientemente deducidas.
Sin poder entrar en mucho detalle por la dimensión del propio artículo, diré que la ecuación de carácter mecánico de la fuerza centrifuga de un planeta o cuerpo, en realidad es deducida de su energía cinética, pero no por la composición con vectores de aceleración que no existen en un movimiento rotacional continuo y controlado, como puede verse en cualquier tratado de física, justificándose simple e incomprensiblemente, por el cambio de dirección de los vectores tangenciales, sino por la composición de vectores de velocidad, y aunque la diferencia es pequeña, es un mejor cálculo, la ecuación más correcta es: P = 0.807mV2/R lo que representa casi un 19% menor de los valores obtenidos por la ciencia académica oficial. Aquí la masa m es lógicamente la totalidad de la masa del cuerpo representada por la suma de la masa de todos sus átomos.
En cuanto a las otras dos ecuaciones de carácter meramente gravitacional, son si cabe, todavía menos correctas o mejor, no son en absoluto correctas. La de la fuerza de atracción gravitacional, he de decir, que está totalmente equivocada y su formulación es solo aparente e incompleta, exenta de la necesaria componente de evolución que rige todo el Universo, debido a las observaciones parciales y superficiales y al desconocimiento del funcionamiento fundamental de la materia y de la energía, porque la fuerza de atracción gravitacional no depende de las masas de los cuerpos, sino solo de las masas (átomos), que pueden originar una interacción total entre sí, de los distintos cuerpos, y de las características de estado de sus átomos.
La gravitación, es en realidad, la expresión de una energía o un trabajo que originan las propias partículas elementales PE a nivel cuántico, por esto, es necesario distinguir entre la cantidad del mismo, que viene representado por el número de PE en acción y la aceleración producida. Por tanto, el peso depende del número de PE en interacción por átomo y del número de átomos en acción interactiva entre dos cuerpos, siendo siempre, uno el “emisor activo” y el otro el “receptor pasivo“. La aceleración de la gravedad en cambio, depende de tres factores:
--De la velocidad de reacción de esa interacción, que coincide necesariamente con la velocidad de la luz. Por esto no notamos ninguna variación en la interacción, por muy grande que sea la velocidad del cuerpo por ejemplo en el Universo.
--De la cantidad de energía o trabajo mecánico en juego por átomo, o lo que es lo mismo, de la cantidad de PE que interaccionan por átomo. En un punto del espacio todos los átomos reciben casi el mismo número de PE, por lo que aparentemente la aceleración de la gravedad en ese punto es igual para todos los cuerpos, aunque estos sean diferentes.
-- De la cantidad de energía o trabajo mecánico en juego. En nuestro ambiente, si queremos que un cuerpo o móvil vaya a mayor o menor aceleración solo tenemos que aplicarle la adecuada energía o trabajo mecánico. En la Gravitación pasa lo mismo, pues el trabajo que se aplica a un cuerpo por átomo y punto espacial del campo, es diferente y depende entre otras cosas, de la distancia, luego a mayor energía, mayor aceleración, para todos los cuerpos igual.
Esta aceleración, sea la que sea inicialmente, siempre llevará al cuerpo, en una supuesta e hipotética caída libre, por ejemplo, a la velocidad de la luz.
En cuanto a la ecuación de la fuerza en aceleración P = mg, es necesario decir, dicho lo anterior, que lo que se entiende por el peso del cuerpo, no puede ser proporcional a toda la masa del cuerpo por su gravedad, ya que dicha masa, no influye, ni en su totalidad, ni tan siquiera en parte según los casos, en las fuerzas de atracción gravitacional y aceleración de la gravedad, por lo que, en ésta y en la otra ecuación de carácter gravitacional, es necesario sustituir el parámetro de la masa m, por otro (masa gravitacional por ejemplo mg) que indique verdaderamente, el valor que influye en esas fuerzas.
Las nuevas ecuaciones entonces, són:
-la de la fuerza centrifuga del movimiento circular, de carácter mecánico (1.1) P = 0.807mV2/R
-la de la fuerza en aceleración, de carácter gravitacional (1.2) P = mgg
-la de la propia fuerza de atracción gravitacional (1.3) P = Knu*Kor*Ypl
De tal forma, que la fuerza o peso P, es P = 0.807mV2/R = mgg = Knu*Kor*Ypl
De las (1.2) y (1.3) se deduce que: mg = Knu*Kor*Ypl /g donde se relaciona la masa gravitacional mg con la gravedad g, una constante numérica Knu, una constante activa o de origen Kor y una variable pasiva o planetaria Ypl .
De las (1.1) y (1.2) g = 0.807mV2/Rmg
De las (1.1) y (1.3) m = Knu*Kor*Ypl*R/0.807V2
Por desgracia, y como cualquier nueva verdad recién nacida, de inmediato será vapuleada, insultada, denostada y hasta intentarán matarla antes que pueda crecer, permítanme que no sea más explicito de momento en estos puntos para que esos autores, ilustres serviles y vasallos de su propia ignorancia, de momento, solo se entretengan en digerir y entender las cosas más simples a las que suelen estar más habituados.
Dicho esto, vamos a ver primero, como se han calculado los parámetros dimensionales y de gravedad oficiales del Sistema Solar y su deslizante e inquietante relatividad.
Ya Galileo en su tiempo, hacia sus pinitos para el cálculo de los diámetros y distancias de los distintos planetas, ayudado muchas veces, de sus rudimentarios instrumentos y anteojos, donde por cierto, y hace 395 años, ya podía comprobar, que en Marte no había nada mas que un espantoso y desolado desierto, sin que le hiciera falta ninguna sonda robotizada de ningún tipo, para comprobar que la vida allí es imposible, eso sí, siempre jugándose la vida por sus estudios e ideas científicas de vanguardia, contrarias a las de la “Santa Inquisición de la famosa religión e Iglesia Cristiana, Católica, Apostólica y Romana, que era el poder gobernante de aquel entonces dirigida por “Papas corruptos y sensuales que también se proclamaban parientes o representantes de Dios “ ¿Se acuerdan de los famosos Borgia?.
Como él ya intuía, el cálculo trigonométrico por observación de los diámetros de la Tierra, de la Luna y demás planetas y del mismo Sol, son muy fáciles de realizar, por lo que debemos considerar buenos, los datos que hoy nos ofrece la ciencia académica oficial. Ejemplos:
---Si observamos la tangente entre la Luna y la Tierra desde el hipotético punto superficial adecuado de ésta última, veremos que es fácil calcular por su posición con relación al ecuador, el ángulo de esa tangente y por tanto, conociendo el diámetro de la Tierra, cosa sencilla de conseguir por su curvatura, es fácil calcular la distancia a la Luna y por tanto también su diámetro.
---Conociendo los datos anteriores, los del Sol son todavía más fáciles, pues por observación, vemos que la relación entre sus radios y distancias a la Tierra tienen como constante, el seno del semiángulo observado desde un punto cualquiera de la superficie ecuatorial de la Tierra por ejemplo, de donde se deduce, que conociendo los de la Luna y el radio del Sol, podemos conocer su distancia a la Tierra.
El resto de datos, como los diámetros y distancias de los demás planetas, se calcula así con bastante precisión. También podemos prever la densidad de la Tierra, por estar encima de ella y conocerla (5.5 con relación a la del agua) y la aceleración de la gravedad superficial (9.75 m/s2 de media) y con estos datos, ya estamos en condiciones de calcular la constante de la gravitación G según la ecuación de antes g = 4.18*G* RT*d y que resulta ser 6.67 *10-11 m3/kgs2 , y con estos datos, ya podemos calcular la gravedad espacial de la Luna según la ecuación RT2gT = ReL2geL o también podríamos aplicar la VL2/ReL = geL y que resulta ser 2,72* 10-3 m/s2
Pero en realidad no se ha hecho así exactamente, sino más bien y para que todo encaje se ha hecho empezando por la cola como se suele decir, esto es, se calcula la gravedad espacial según la última ecuación, que resulta ser el valor mencionado, pues se conoce casi exactamente el radio medio de la orbita de la Luna y su velocidad y luego se redondea la densidad de la Tierra a conveniencia, ya que es un valor mucho más relativo y aparente, por lo que si no es exacto nadie lo podrá ni comprobar ni demostrar, llegando así al valor de la constante G necesaria. Pero si las ecuaciones arrastran errores, la gravedad espacial de la Luna también, y de hecho podría ser más pequeña, hasta en un 19% como ya hemos visto. ¿Y que pasa si es más pequeño este valor? Pues que la constante G o la densidad de la Tierra deberían ser más pequeñas, cosa sin mayor importancia aparente si las variaciones son pequeñas pero problemático si son grandes.
¿Y que pasa con la gravedad superficial de la Luna? pues en este caso, es necesario hacer lo mismo que en el caso de la Tierra y es necesario fijar una densidad, al tener ya fijada la constante G, pero aquí el problema es mayor, porque no se conoce adecuadamente la composición de la Luna, y por tanto, si se le da un valor alto, la gravedad es alta y si se le da un valor bajo, lo contrario, pero por las sondas enviadas, se ha podido prever que pueda ser pequeña, por lo que se le asigna una densidad de 3.34 (la más pequeña creíble) con relación a la del agua y el resultado sale entonces una gravedad superficial de 1.62 m/s2, relativamente baja con relación a la Tierra ¿Pero que pasa si la densidad de la Luna es mucho mayor como es de suponer y supera el valor de 6 por ejemplo? Pues que la gravedad superficial de la Luna sería casi de 3, lo que representaría la tercera parte de la Tierra y esto ya no encajaría adecuadamente, sobre todo, teniendo en cuanta los distintos tamaños y masas de ambos astros.
Pero vamos a ver también que está sucediendo con el Sol. Pues aquí conocemos sus dimensiones como hemos dicho y como conocemos la gravedad espacial de la Tierra 5.93* 10-3 m/s2 , por la misma ecuación anterior VT2/ReT = geT , ya podemos calcular la gravedad superficial del Sol, con la ecuación RS2gsS = ReT2geT que resulta ser de 274 m/s2 y con este valor, nos vamos a la ecuación gsS = 4.18*G* RS*d donde ya conocemos todos los datos y parámetros, menos la densidad, que calculándola resulta ser de 1.4 con relación a la del agua, y que aparentemente resulta ser muy elevada, pensando que en el Sol, fundamentalmente solo hay Hidrógeno a muy altas temperaturas, por lo que esta densidad, debería de ser con relación a las condiciones ambientales, del orden de 10.000 veces menor como máximo. Les recuerdo que la teoría unificada física de cuerdas CFD prevé la inexistencia de fuerzas gravitacionales entre átomos homogéneos idénticos, pero está claro que esto no está sucediendo en el Sol, donde aparentemente si parece que existe una cierta fuerza gravitacional entre ellos, además de las fuerzas de su interacción propias, pero este hecho que también esta predicho por ésta teoría, es debido a un fenómeno increíble de la materia y que ya definimos en su día como mutación térmica de ciertos átomos al cambiar sus características ambientales, que hacen que la radiación emitida por los átomos en movimiento del interior, sea absorbida enteramente por los átomos en movimiento del exterior, originado tremendas fuerzas gravitacionales entre ellos, que originan a su vez, el desarrollo de enormes energías cinéticas y también, un mecanismos dosificador de energía llamado RME (reutilización de la materia elemental) que será la futura fuente de energía de la Humanidad mediante pilas de PE. Estos fenómenos, han hecho en el siglo pasado, creer a la ciencia académica oficial, la existencia de la fusión nuclear de los átomos de Hidrógeno, en primer lugar y en segundo lugar, que la gravedad del Sistema Solar era debido a esta cantidad enorme de masa que debe de existir en el Sol, claro está, sin poder explicar de donde sale esa enorme presión y energía interior. Lógicamente estas dos ideas y teorías al ser meramente aparentes y sin comprobación, están resultando ser totalmente erróneas y puestas entre dicho cada día que pasa, de forma acelerada por todo el mundo científico libre y oxigenado.
¿Pero entonces existe o no existe toda esa cantidad de masa, de presión y elevada densidad en el Sol? Pues miren Vds., como ya habrán podido deducir, existir, existen, pero no a nivel gravitacional, pues al no salir la radiación de esos átomos del interior es como si no existiera y por tanto tampoco los efectos de la gravedad, que en realidad, es solo debido a los átomos de un pequeño (de momento) anillo esférico en crecimiento de átomos, que si están emitiendo al exterior.
Por esto, la ciencia académica oficial, engañada por las apariencias y saliendo de unos años bonancibles de grandes descubrimientos y favores a los poderes de turno con el desarrollo de las energías de destrucción masiva nucleares, la radiactividad, la electricidad, las comunicaciones, etc., que la catapultaron a la cúspide del prestigio, no podía equivocarse en una cosa tan simple y tan aparentemente clara. Y así, de esta manera, se mataron dos pájaros de un tiro. La ley de la Gravitación Universal encajaba perfectamente, y la teoría de la fusión nuclear en el Sol y en las estrellas también. (1)
¿Y que pasará entonces, cuando se descubra oficialmente, que la fusión nuclear es imposible fuera del big bang y que por tanto, esa densidad para el Sol es ridículamente pequeña? Pues, que también se descubrirá, que la ley de Gravitación Universal es imposible.
Hagamos un simple ejercicio de comprobación: Si la densidad es mucho mas grande, como se prevé en el Sol, del orden de 1.000 veces más por ejemplo, la gravedad superficial del Sol y la espacial de la Tierra, también lo serían, pero como ésta última no puede cambiar porque no cambia su movimiento y velocidad, ya no serían compatibles y la ley de gravitación tampoco.
Sin embargo, si en el Sistema Solar cambiara la masa gravitacional del Sol y la consideramos muchísimo más pequeña, pero hacemos depender a la energía de atracción, de una serie de parámetros y características como la frecuencia, el número de PE, el gradiente cuántico de energía gravitacional, etc., por ejemplo ¿Que pasaría con los planetas? pues nada, todo seguiría igual, pues sus dimensiones relativas como vemos por la ecuaciones anteriores ya corregidas, no dependen de la masa del Sol, ni la de los planetas, pero la densidad del Sol, ya podría ser 1.000 veces más grande. ¿Y si esto es así para los planetas que giran alrededor del Sol, también sería igual para la Luna que gira alrededor de la Tierra? Pues exactamente igual, porque habría siempre unos sumatorios ponderados de átomos que emiten PE y que interaccionan totalmente con los átomos de la Luna, que harían que la situación actual sea la que es. Por tanto, sin que cambie nada de lo que conocemos, es posible:
--- sustituir el parámetro masa m por otro cuyo valor es más adecuado y exacto para las ecuaciones exclusivamente de carácter gravitacional como la masa gravitacional mg.
--- sustituir la ecuación de carácter gravitacional, por otra donde son sustituidas las masas de los cuerpos por el número de PE en interacción total entre ellos y demás componentes. (1)
Pero además justificaría varias cuestiones todavía sin aclarar por parte de la ciencia académica oficial:
1º.-- ¿Porque la gravedad superficial de Mercurio (13.41 m/s2) es más elevada que la calculada por las ecuaciones anteriores (3.68 m/s2)? Porque la fuerza de atracción al depender de la interacción del número de PE entre el Sol y Mercurio y al estar éste, para entendernos, muy caliente, éste número de PE disminuye muy significativamente, manteniendo adecuadamente la gravedad espacial, independientemente de la gravedad superficial, con la que ocurre todo lo contrario y puede ser muy elevada con relación a planetas ambientales como el nuestro.
2º.-- ¿Porque la gravedad espacial, calculada también con estas ecuaciones, es correcta en la Luna (2.72*10-3 m/s2) y no a 250 km, de la Tierra, que resulta ser de 9.20 m/s2 y a 450 Km, de 8.67 m/s2, cuando todos sabemos ya, por los viajes espaciales que no es así, pues vemos a los astronautas en viajes exteriores sin ningún tipo de gravedad y sin que la ciencia académica oficial lo desmienta o corrija? Porque la variación de la gravedad espacial, no obedece a estas ecuaciones de la ciencia académica oficial, donde se está mezclando el valido parámetro de la masa total de una ecuación de carácter mecánico, como la deducida de una energía cinética, con otro igual, pero de carácter gravitacional, donde el valor de esa masa, ya no corresponde a la totalidad de la misma ni tan siquiera a una parte, sino a un número de PE en interacción completa, entre dos cuerpos.
3º.--¿Porque dos cuerpos a la misma temperatura se junten o no, carecen de atracción gravitacional entre sí? Sencillamente, porque ninguna de las PE emitidas entre ambos cuerpos en ese estado, interaccionan totalmente.
4º.-- ¿Porque un planeta externo tan distante como Plutón, a 5.900 millones de kilómetros por ejemplo, con una velocidad de translación de 4.74 Km/s y sin apenas masa y con peso muy pequeño, mantiene esa insistente precisión, sin salirse nunca de su orbita alrededor del Sol ?
Pues sencillamente también, porque aunque es enormemente menor el número de PE que llegan a interaccionar con los átomos de este planeta, curiosamente también, éstas desarrollan un valor cuántico de energía o trabajo gravitacional, mucho más grande que en Venus o en Marte por ejemplo. Por lo cual y paradójicamente, las fuerzas gravitacionales entre Mercurio y Plutón por ejemplo, al no depender proporcionalmente, solo del número de PE como tal, sino también y entre otras cosas, del valor cuántico de energía de cada PE, resulta entonces, que en realidad, ya no existe tanta diferencia como parece.
Como conclusión, podemos deducir, que según estos nuevos enfoques de la gravitación, según la teoría unificada física de cuerdas CFD podemos deducir que no existe una absoluta estabilidad a nivel gravitacional, en el Sistema Solar y existe una evolución continua. En la actualidad y después de un periodo inicial de expansión, todos los planetas están disminuyendo sus orbitas aunque de forma insignificante todavía, incluida la Tierra, debido a que cada ciclo solar está aumentando el número de átomos que emiten al exterior desde la periferia del Sol.
A nivel de cada planeta, su gravedad superficial, al estar relacionada aproximadamente con la homogeneidad de su radiación, es fácil deducir, que cuanto más lo sea, más fácil será deducir y prever su comportamiento a nivel gravitacional. Así por ejemplo, en la Luna, al ser un astro tan pequeño y tan antiguo, podemos fácilmente prever, que su temperatura es bastante homogénea, tanto en el interior como en el exterior y además, ésta debe de ser baja como media, inferior seguramente a la ambiental de nuestro planeta. Y en estas condiciones la gravedad superficial para nosotros en la Luna deberá ser muy pequeña, casi cero, por supuesto mucho más pequeña que la observada en esos videos de la famosa y falsa colonización. Les recuerdo que las mareas lunares tienen al agua del mar como cuerpo activo, y a la Luna como cuerpo pasivo, por lo que no dependen de la gravedad superficial de esta última que puede ser casi cero. En el caso de Marte por ejemplo, al ser éste un planeta pequeño, la mitad de diámetro que la Tierra y muy frío exteriormente, pero no tanto a nivel interior, por los dos pequeños satélites que tiene, que están indicando un relativo calor en su interior, es de suponer que su gravedad superficial sea para nosotros algo superior que la de la Luna. En cualquier caso siempre bajas, y solo conocidas de forma experimental, aunque también podrían conocerse matemáticamente, mediante el adecuado y muy complejo programa informático integral de modelización matemática de evolución y formación del entero sistema solar.
Fco Moreno Meco-----Madrid -- mteasl@hotmail.com
Ingeniero, científico e investigador de la materia y energía
(1) ver otros artículos como: -FUSIÓN NUCLEAR. MATEMÝTICAS Y EVOLUCION - EVOLUCIÓN RME DEL SOL Y LAS ESTRELLAS - GÉNESIS DEL ORIGEN DE LA VIDA - CARACTER PROVIDENCIAL DE LA EXISTENCIA DEL HOMBRE -CONCLUSIONES. SOLO 275 MILLONES DE AÑOS MAS Y CON APUROS - LOS SECRETOS DE LA GRAVITACIÓN - LUZ Y RADIACIÓN. NUEVOS ENFOQUES DE LA FÝSICA. COLOR ¿SOLO PARTÝCULAS MODIFICADAS? - LA HUMANIDAD Y SU DESTINO - EXPANSIÓN DEL UNIVERSO ¿Por qué aceleradamente? - ¿QUE ES LA MATERIA?
Parece que en el año 2.004 vamos a presenciar una nueva carrera de dominio científico-político entre continentes y países, por conseguir ser los primeros en el control, investigación y conocimiento de Marte, exactamente igual, como “ayer” lo fue la falsa conquista cientifico-politica de la Luna. Al final como siempre todo quedará seguramente con el desmontaje de algún teatro improvisado, eso sí, después de que cada cual, jefes y sirvientes hayan terminado de sacar provecho mutuo de la escena.
El conocimiento es sinónimo de evolución, por eso cuando el conocimiento se utiliza como herramienta para mantener el tradicionalismo, el inmovilismo, la idiotez y el fanatismo de todo tipo, necesariamente ese conocimiento será y estará secuestrado.
Sirva esto de colofón o preámbulo para hablar de la Gravitación. Pues si de verdad queremos visitar la Luna o Marte o cualquier otro planeta, necesariamente debemos saber sus características y fundamental sus gravedades superficial y espacial. Y Vds. pueden decir ¿Pero es que no la conocemos ya con la famosa ley de Gravitación Universal? Debo de responder que no. Miren Vds., esta ley, la que dicen del Sr. Newton, publicada en 1666, resumiendo las ideas y fórmulas de otros que por diversos motivos fundamentalmente económicos, no pudieron publicar antes y asumida enteramente por la ciencia académica oficial, esta basada en tres ecuaciones matemáticas sobradamente de todos conocidas:
-la de la fuerza centrifuga del movimiento circular, de carácter mecánico (1.1) P = mV2/R,
-la de la fuerza en aceleración, de carácter gravitacional (1.2) P = mg
-la de la propia fuerza de atracción gravitacional, de su mismo de carácter (1.3) P = GMm/R2
De tal forma, que la fuerza o peso P, es P = mV2/R = mg = GMm/R2
De las (1.2) y (1.3) se deduce que: g = GM/R2 o lo que es lo mismo g = 4.18*G* R*d donde se relaciona la gravedad superficial g, con la constante gravitacional G, la densidad d, y el radio R, de un planeta o cuerpo. También que R12g1 = R22g2
De las (1.1) y (1.2) V2/R = g o lo que es lo mismo V12/g1R1 = V22/g2R2
De las (1.1) y (1.3) V12R1 = V22R2
Como vemos estas ecuaciones relacionan el peso, con las dimensiones, la masa, la gravedad superficial o espacial y la velocidad de traslación entre sí, y con la masa del Sol.
Con estas ecuaciones y dando valores obtenidos de las observaciones oportunas como el radio y distancia de los planetas a la Tierra y al Sol, la densidad y la velocidad de traslación de los mismos, se han obtenido todos los valores y datos de la gravedad de cualquier planeta.
Pero viendo estas ecuaciones, surge la primera pregunta ¿Son correctas y están bien deducidas estas ecuaciones? Pues miren Vds., la respuesta es que no son correctas, ni están suficientemente deducidas.
Sin poder entrar en mucho detalle por la dimensión del propio artículo, diré que la ecuación de carácter mecánico de la fuerza centrifuga de un planeta o cuerpo, en realidad es deducida de su energía cinética, pero no por la composición con vectores de aceleración que no existen en un movimiento rotacional continuo y controlado, como puede verse en cualquier tratado de física, justificándose simple e incomprensiblemente, por el cambio de dirección de los vectores tangenciales, sino por la composición de vectores de velocidad, y aunque la diferencia es pequeña, es un mejor cálculo, la ecuación más correcta es: P = 0.807mV2/R lo que representa casi un 19% menor de los valores obtenidos por la ciencia académica oficial. Aquí la masa m es lógicamente la totalidad de la masa del cuerpo representada por la suma de la masa de todos sus átomos.
En cuanto a las otras dos ecuaciones de carácter meramente gravitacional, son si cabe, todavía menos correctas o mejor, no son en absoluto correctas. La de la fuerza de atracción gravitacional, he de decir, que está totalmente equivocada y su formulación es solo aparente e incompleta, exenta de la necesaria componente de evolución que rige todo el Universo, debido a las observaciones parciales y superficiales y al desconocimiento del funcionamiento fundamental de la materia y de la energía, porque la fuerza de atracción gravitacional no depende de las masas de los cuerpos, sino solo de las masas (átomos), que pueden originar una interacción total entre sí, de los distintos cuerpos, y de las características de estado de sus átomos.
La gravitación, es en realidad, la expresión de una energía o un trabajo que originan las propias partículas elementales PE a nivel cuántico, por esto, es necesario distinguir entre la cantidad del mismo, que viene representado por el número de PE en acción y la aceleración producida. Por tanto, el peso depende del número de PE en interacción por átomo y del número de átomos en acción interactiva entre dos cuerpos, siendo siempre, uno el “emisor activo” y el otro el “receptor pasivo“. La aceleración de la gravedad en cambio, depende de tres factores:
--De la velocidad de reacción de esa interacción, que coincide necesariamente con la velocidad de la luz. Por esto no notamos ninguna variación en la interacción, por muy grande que sea la velocidad del cuerpo por ejemplo en el Universo.
--De la cantidad de energía o trabajo mecánico en juego por átomo, o lo que es lo mismo, de la cantidad de PE que interaccionan por átomo. En un punto del espacio todos los átomos reciben casi el mismo número de PE, por lo que aparentemente la aceleración de la gravedad en ese punto es igual para todos los cuerpos, aunque estos sean diferentes.
-- De la cantidad de energía o trabajo mecánico en juego. En nuestro ambiente, si queremos que un cuerpo o móvil vaya a mayor o menor aceleración solo tenemos que aplicarle la adecuada energía o trabajo mecánico. En la Gravitación pasa lo mismo, pues el trabajo que se aplica a un cuerpo por átomo y punto espacial del campo, es diferente y depende entre otras cosas, de la distancia, luego a mayor energía, mayor aceleración, para todos los cuerpos igual.
Esta aceleración, sea la que sea inicialmente, siempre llevará al cuerpo, en una supuesta e hipotética caída libre, por ejemplo, a la velocidad de la luz.
En cuanto a la ecuación de la fuerza en aceleración P = mg, es necesario decir, dicho lo anterior, que lo que se entiende por el peso del cuerpo, no puede ser proporcional a toda la masa del cuerpo por su gravedad, ya que dicha masa, no influye, ni en su totalidad, ni tan siquiera en parte según los casos, en las fuerzas de atracción gravitacional y aceleración de la gravedad, por lo que, en ésta y en la otra ecuación de carácter gravitacional, es necesario sustituir el parámetro de la masa m, por otro (masa gravitacional por ejemplo mg) que indique verdaderamente, el valor que influye en esas fuerzas.
Las nuevas ecuaciones entonces, són:
-la de la fuerza centrifuga del movimiento circular, de carácter mecánico (1.1) P = 0.807mV2/R
-la de la fuerza en aceleración, de carácter gravitacional (1.2) P = mgg
-la de la propia fuerza de atracción gravitacional (1.3) P = Knu*Kor*Ypl
De tal forma, que la fuerza o peso P, es P = 0.807mV2/R = mgg = Knu*Kor*Ypl
De las (1.2) y (1.3) se deduce que: mg = Knu*Kor*Ypl /g donde se relaciona la masa gravitacional mg con la gravedad g, una constante numérica Knu, una constante activa o de origen Kor y una variable pasiva o planetaria Ypl .
De las (1.1) y (1.2) g = 0.807mV2/Rmg
De las (1.1) y (1.3) m = Knu*Kor*Ypl*R/0.807V2
Por desgracia, y como cualquier nueva verdad recién nacida, de inmediato será vapuleada, insultada, denostada y hasta intentarán matarla antes que pueda crecer, permítanme que no sea más explicito de momento en estos puntos para que esos autores, ilustres serviles y vasallos de su propia ignorancia, de momento, solo se entretengan en digerir y entender las cosas más simples a las que suelen estar más habituados.
Dicho esto, vamos a ver primero, como se han calculado los parámetros dimensionales y de gravedad oficiales del Sistema Solar y su deslizante e inquietante relatividad.
Ya Galileo en su tiempo, hacia sus pinitos para el cálculo de los diámetros y distancias de los distintos planetas, ayudado muchas veces, de sus rudimentarios instrumentos y anteojos, donde por cierto, y hace 395 años, ya podía comprobar, que en Marte no había nada mas que un espantoso y desolado desierto, sin que le hiciera falta ninguna sonda robotizada de ningún tipo, para comprobar que la vida allí es imposible, eso sí, siempre jugándose la vida por sus estudios e ideas científicas de vanguardia, contrarias a las de la “Santa Inquisición de la famosa religión e Iglesia Cristiana, Católica, Apostólica y Romana, que era el poder gobernante de aquel entonces dirigida por “Papas corruptos y sensuales que también se proclamaban parientes o representantes de Dios “ ¿Se acuerdan de los famosos Borgia?.
Como él ya intuía, el cálculo trigonométrico por observación de los diámetros de la Tierra, de la Luna y demás planetas y del mismo Sol, son muy fáciles de realizar, por lo que debemos considerar buenos, los datos que hoy nos ofrece la ciencia académica oficial. Ejemplos:
---Si observamos la tangente entre la Luna y la Tierra desde el hipotético punto superficial adecuado de ésta última, veremos que es fácil calcular por su posición con relación al ecuador, el ángulo de esa tangente y por tanto, conociendo el diámetro de la Tierra, cosa sencilla de conseguir por su curvatura, es fácil calcular la distancia a la Luna y por tanto también su diámetro.
---Conociendo los datos anteriores, los del Sol son todavía más fáciles, pues por observación, vemos que la relación entre sus radios y distancias a la Tierra tienen como constante, el seno del semiángulo observado desde un punto cualquiera de la superficie ecuatorial de la Tierra por ejemplo, de donde se deduce, que conociendo los de la Luna y el radio del Sol, podemos conocer su distancia a la Tierra.
El resto de datos, como los diámetros y distancias de los demás planetas, se calcula así con bastante precisión. También podemos prever la densidad de la Tierra, por estar encima de ella y conocerla (5.5 con relación a la del agua) y la aceleración de la gravedad superficial (9.75 m/s2 de media) y con estos datos, ya estamos en condiciones de calcular la constante de la gravitación G según la ecuación de antes g = 4.18*G* RT*d y que resulta ser 6.67 *10-11 m3/kgs2 , y con estos datos, ya podemos calcular la gravedad espacial de la Luna según la ecuación RT2gT = ReL2geL o también podríamos aplicar la VL2/ReL = geL y que resulta ser 2,72* 10-3 m/s2
Pero en realidad no se ha hecho así exactamente, sino más bien y para que todo encaje se ha hecho empezando por la cola como se suele decir, esto es, se calcula la gravedad espacial según la última ecuación, que resulta ser el valor mencionado, pues se conoce casi exactamente el radio medio de la orbita de la Luna y su velocidad y luego se redondea la densidad de la Tierra a conveniencia, ya que es un valor mucho más relativo y aparente, por lo que si no es exacto nadie lo podrá ni comprobar ni demostrar, llegando así al valor de la constante G necesaria. Pero si las ecuaciones arrastran errores, la gravedad espacial de la Luna también, y de hecho podría ser más pequeña, hasta en un 19% como ya hemos visto. ¿Y que pasa si es más pequeño este valor? Pues que la constante G o la densidad de la Tierra deberían ser más pequeñas, cosa sin mayor importancia aparente si las variaciones son pequeñas pero problemático si son grandes.
¿Y que pasa con la gravedad superficial de la Luna? pues en este caso, es necesario hacer lo mismo que en el caso de la Tierra y es necesario fijar una densidad, al tener ya fijada la constante G, pero aquí el problema es mayor, porque no se conoce adecuadamente la composición de la Luna, y por tanto, si se le da un valor alto, la gravedad es alta y si se le da un valor bajo, lo contrario, pero por las sondas enviadas, se ha podido prever que pueda ser pequeña, por lo que se le asigna una densidad de 3.34 (la más pequeña creíble) con relación a la del agua y el resultado sale entonces una gravedad superficial de 1.62 m/s2, relativamente baja con relación a la Tierra ¿Pero que pasa si la densidad de la Luna es mucho mayor como es de suponer y supera el valor de 6 por ejemplo? Pues que la gravedad superficial de la Luna sería casi de 3, lo que representaría la tercera parte de la Tierra y esto ya no encajaría adecuadamente, sobre todo, teniendo en cuanta los distintos tamaños y masas de ambos astros.
Pero vamos a ver también que está sucediendo con el Sol. Pues aquí conocemos sus dimensiones como hemos dicho y como conocemos la gravedad espacial de la Tierra 5.93* 10-3 m/s2 , por la misma ecuación anterior VT2/ReT = geT , ya podemos calcular la gravedad superficial del Sol, con la ecuación RS2gsS = ReT2geT que resulta ser de 274 m/s2 y con este valor, nos vamos a la ecuación gsS = 4.18*G* RS*d donde ya conocemos todos los datos y parámetros, menos la densidad, que calculándola resulta ser de 1.4 con relación a la del agua, y que aparentemente resulta ser muy elevada, pensando que en el Sol, fundamentalmente solo hay Hidrógeno a muy altas temperaturas, por lo que esta densidad, debería de ser con relación a las condiciones ambientales, del orden de 10.000 veces menor como máximo. Les recuerdo que la teoría unificada física de cuerdas CFD prevé la inexistencia de fuerzas gravitacionales entre átomos homogéneos idénticos, pero está claro que esto no está sucediendo en el Sol, donde aparentemente si parece que existe una cierta fuerza gravitacional entre ellos, además de las fuerzas de su interacción propias, pero este hecho que también esta predicho por ésta teoría, es debido a un fenómeno increíble de la materia y que ya definimos en su día como mutación térmica de ciertos átomos al cambiar sus características ambientales, que hacen que la radiación emitida por los átomos en movimiento del interior, sea absorbida enteramente por los átomos en movimiento del exterior, originado tremendas fuerzas gravitacionales entre ellos, que originan a su vez, el desarrollo de enormes energías cinéticas y también, un mecanismos dosificador de energía llamado RME (reutilización de la materia elemental) que será la futura fuente de energía de la Humanidad mediante pilas de PE. Estos fenómenos, han hecho en el siglo pasado, creer a la ciencia académica oficial, la existencia de la fusión nuclear de los átomos de Hidrógeno, en primer lugar y en segundo lugar, que la gravedad del Sistema Solar era debido a esta cantidad enorme de masa que debe de existir en el Sol, claro está, sin poder explicar de donde sale esa enorme presión y energía interior. Lógicamente estas dos ideas y teorías al ser meramente aparentes y sin comprobación, están resultando ser totalmente erróneas y puestas entre dicho cada día que pasa, de forma acelerada por todo el mundo científico libre y oxigenado.
¿Pero entonces existe o no existe toda esa cantidad de masa, de presión y elevada densidad en el Sol? Pues miren Vds., como ya habrán podido deducir, existir, existen, pero no a nivel gravitacional, pues al no salir la radiación de esos átomos del interior es como si no existiera y por tanto tampoco los efectos de la gravedad, que en realidad, es solo debido a los átomos de un pequeño (de momento) anillo esférico en crecimiento de átomos, que si están emitiendo al exterior.
Por esto, la ciencia académica oficial, engañada por las apariencias y saliendo de unos años bonancibles de grandes descubrimientos y favores a los poderes de turno con el desarrollo de las energías de destrucción masiva nucleares, la radiactividad, la electricidad, las comunicaciones, etc., que la catapultaron a la cúspide del prestigio, no podía equivocarse en una cosa tan simple y tan aparentemente clara. Y así, de esta manera, se mataron dos pájaros de un tiro. La ley de la Gravitación Universal encajaba perfectamente, y la teoría de la fusión nuclear en el Sol y en las estrellas también. (1)
¿Y que pasará entonces, cuando se descubra oficialmente, que la fusión nuclear es imposible fuera del big bang y que por tanto, esa densidad para el Sol es ridículamente pequeña? Pues, que también se descubrirá, que la ley de Gravitación Universal es imposible.
Hagamos un simple ejercicio de comprobación: Si la densidad es mucho mas grande, como se prevé en el Sol, del orden de 1.000 veces más por ejemplo, la gravedad superficial del Sol y la espacial de la Tierra, también lo serían, pero como ésta última no puede cambiar porque no cambia su movimiento y velocidad, ya no serían compatibles y la ley de gravitación tampoco.
Sin embargo, si en el Sistema Solar cambiara la masa gravitacional del Sol y la consideramos muchísimo más pequeña, pero hacemos depender a la energía de atracción, de una serie de parámetros y características como la frecuencia, el número de PE, el gradiente cuántico de energía gravitacional, etc., por ejemplo ¿Que pasaría con los planetas? pues nada, todo seguiría igual, pues sus dimensiones relativas como vemos por la ecuaciones anteriores ya corregidas, no dependen de la masa del Sol, ni la de los planetas, pero la densidad del Sol, ya podría ser 1.000 veces más grande. ¿Y si esto es así para los planetas que giran alrededor del Sol, también sería igual para la Luna que gira alrededor de la Tierra? Pues exactamente igual, porque habría siempre unos sumatorios ponderados de átomos que emiten PE y que interaccionan totalmente con los átomos de la Luna, que harían que la situación actual sea la que es. Por tanto, sin que cambie nada de lo que conocemos, es posible:
--- sustituir el parámetro masa m por otro cuyo valor es más adecuado y exacto para las ecuaciones exclusivamente de carácter gravitacional como la masa gravitacional mg.
--- sustituir la ecuación de carácter gravitacional, por otra donde son sustituidas las masas de los cuerpos por el número de PE en interacción total entre ellos y demás componentes. (1)
Pero además justificaría varias cuestiones todavía sin aclarar por parte de la ciencia académica oficial:
1º.-- ¿Porque la gravedad superficial de Mercurio (13.41 m/s2) es más elevada que la calculada por las ecuaciones anteriores (3.68 m/s2)? Porque la fuerza de atracción al depender de la interacción del número de PE entre el Sol y Mercurio y al estar éste, para entendernos, muy caliente, éste número de PE disminuye muy significativamente, manteniendo adecuadamente la gravedad espacial, independientemente de la gravedad superficial, con la que ocurre todo lo contrario y puede ser muy elevada con relación a planetas ambientales como el nuestro.
2º.-- ¿Porque la gravedad espacial, calculada también con estas ecuaciones, es correcta en la Luna (2.72*10-3 m/s2) y no a 250 km, de la Tierra, que resulta ser de 9.20 m/s2 y a 450 Km, de 8.67 m/s2, cuando todos sabemos ya, por los viajes espaciales que no es así, pues vemos a los astronautas en viajes exteriores sin ningún tipo de gravedad y sin que la ciencia académica oficial lo desmienta o corrija? Porque la variación de la gravedad espacial, no obedece a estas ecuaciones de la ciencia académica oficial, donde se está mezclando el valido parámetro de la masa total de una ecuación de carácter mecánico, como la deducida de una energía cinética, con otro igual, pero de carácter gravitacional, donde el valor de esa masa, ya no corresponde a la totalidad de la misma ni tan siquiera a una parte, sino a un número de PE en interacción completa, entre dos cuerpos.
3º.--¿Porque dos cuerpos a la misma temperatura se junten o no, carecen de atracción gravitacional entre sí? Sencillamente, porque ninguna de las PE emitidas entre ambos cuerpos en ese estado, interaccionan totalmente.
4º.-- ¿Porque un planeta externo tan distante como Plutón, a 5.900 millones de kilómetros por ejemplo, con una velocidad de translación de 4.74 Km/s y sin apenas masa y con peso muy pequeño, mantiene esa insistente precisión, sin salirse nunca de su orbita alrededor del Sol ?
Pues sencillamente también, porque aunque es enormemente menor el número de PE que llegan a interaccionar con los átomos de este planeta, curiosamente también, éstas desarrollan un valor cuántico de energía o trabajo gravitacional, mucho más grande que en Venus o en Marte por ejemplo. Por lo cual y paradójicamente, las fuerzas gravitacionales entre Mercurio y Plutón por ejemplo, al no depender proporcionalmente, solo del número de PE como tal, sino también y entre otras cosas, del valor cuántico de energía de cada PE, resulta entonces, que en realidad, ya no existe tanta diferencia como parece.
Como conclusión, podemos deducir, que según estos nuevos enfoques de la gravitación, según la teoría unificada física de cuerdas CFD podemos deducir que no existe una absoluta estabilidad a nivel gravitacional, en el Sistema Solar y existe una evolución continua. En la actualidad y después de un periodo inicial de expansión, todos los planetas están disminuyendo sus orbitas aunque de forma insignificante todavía, incluida la Tierra, debido a que cada ciclo solar está aumentando el número de átomos que emiten al exterior desde la periferia del Sol.
A nivel de cada planeta, su gravedad superficial, al estar relacionada aproximadamente con la homogeneidad de su radiación, es fácil deducir, que cuanto más lo sea, más fácil será deducir y prever su comportamiento a nivel gravitacional. Así por ejemplo, en la Luna, al ser un astro tan pequeño y tan antiguo, podemos fácilmente prever, que su temperatura es bastante homogénea, tanto en el interior como en el exterior y además, ésta debe de ser baja como media, inferior seguramente a la ambiental de nuestro planeta. Y en estas condiciones la gravedad superficial para nosotros en la Luna deberá ser muy pequeña, casi cero, por supuesto mucho más pequeña que la observada en esos videos de la famosa y falsa colonización. Les recuerdo que las mareas lunares tienen al agua del mar como cuerpo activo, y a la Luna como cuerpo pasivo, por lo que no dependen de la gravedad superficial de esta última que puede ser casi cero. En el caso de Marte por ejemplo, al ser éste un planeta pequeño, la mitad de diámetro que la Tierra y muy frío exteriormente, pero no tanto a nivel interior, por los dos pequeños satélites que tiene, que están indicando un relativo calor en su interior, es de suponer que su gravedad superficial sea para nosotros algo superior que la de la Luna. En cualquier caso siempre bajas, y solo conocidas de forma experimental, aunque también podrían conocerse matemáticamente, mediante el adecuado y muy complejo programa informático integral de modelización matemática de evolución y formación del entero sistema solar.
Fco Moreno Meco-----Madrid -- mteasl@hotmail.com
Ingeniero, científico e investigador de la materia y energía
(1) ver otros artículos como: -FUSIÓN NUCLEAR. MATEMÝTICAS Y EVOLUCION - EVOLUCIÓN RME DEL SOL Y LAS ESTRELLAS - GÉNESIS DEL ORIGEN DE LA VIDA - CARACTER PROVIDENCIAL DE LA EXISTENCIA DEL HOMBRE -CONCLUSIONES. SOLO 275 MILLONES DE AÑOS MAS Y CON APUROS - LOS SECRETOS DE LA GRAVITACIÓN - LUZ Y RADIACIÓN. NUEVOS ENFOQUES DE LA FÝSICA. COLOR ¿SOLO PARTÝCULAS MODIFICADAS? - LA HUMANIDAD Y SU DESTINO - EXPANSIÓN DEL UNIVERSO ¿Por qué aceleradamente? - ¿QUE ES LA MATERIA?