España

Como los monos. Mientras les echen cacahuetes, no se preocuparán de buscar alimento.

X+Y=Z

Si de eso se trata en el mundo, la economía más competitiva del mundo es hoy en día y se prevé para el futuro, la República de China.
Tengo personalmente serias dudas sobre esta forma de pensamiento.
El pensamiento del consumismo y de la creación de necesidades inexistentes.
Suelo reducirme en mis idea a la realidad diaria, al círculo pequeño en que nos desarrollamos.
Siendo que la investigación ciéntifica ya está a la altura de producir bienes y objetos que podrían perdurar hasta el resto de los días de cualquier viviente, la sociedad económica de consumo se empeña en produccir lavadoras, teléfonos móviles, computadoras, ropas diseñadas para cambiar de gusto en cada año, sino en cada estación, automóviles de recambio, multinacionales del poder "compra y deshecho" al estilo Microsoft. Monopolizadores de los deseos inmesurables de la gente.
La realidad es que con la técnica y ciencia adquiridad una lavadora, una computadora y un teléfono móbil pudieran ser transmitidos por herencia al menos a nuestros hijos. La cuestión es no ya de que nos sirve la técnica y el avance, la cuestión es ser más, tener el último producto completamente incompatible con el anterior. La cuestión es el liberalismo degenerado hasta sus últimos extremos.
La cuestión es que no se paren las sociedades de consumo. Que existan los monopolios que se cambien los monopolios. Que mi móbil no se pueda cargar con el mismos transformador eléctrico con el que se carga el tuyo.
La cuestiós es que haya siempre un producto nuevo completamente innecesario, si no fuese por ese afán de la competividad y del enriquecimiento. Y de hacer creer, y para colmo conseguirlo, a esa manada mansa de becerros, que para triunfar en el mundo es decisivo tener el último modelo.