España

Don Josep era un catalán que era dueño de un simpático restaurante, en el Parque de la Alameda quiteño.

Donde termina el Centro Histórico de mi ciudad, que le encanta a casi todo español que viene por acá, y empieza la ciudad moderna.

Una noche, muchos años atrás, yo andaba por ahí, esperando un taxi. Y de pronto observe que Don Josep estaba haciendo exáctamente lo mismo. Me acerque, y le pregunté donde iba.

Coincidía que ibamos prácticamente en la misma direccción. Por lo tanto nos fuimos juntos, y pagamos el taxi entre los dos.

Fuimos conversando en el taxi, y aproveché para preguntarle:

_Don Josep ¿Que es esto de los charnegos?

El me respondió así: De esa manera les llamamos a los andaluces y a los extremeños. No les queremos porque pensamos que son sucios, ladrones, vagos, borrachos, mentirosos, hediondos, no se bañan, no se cortan la barba.

Entre mi pensaba. Exáctamente eso piensan los yanquis anglosajones de nosotros los sudacas.

Estos son los prejuicios humanos, que nacen del desconocimiento mutuo de las diversas manifestaciones humanas.

Pero miren Uds. que estos prejuicios anglosajones no fueron obstáculo para convertir a Estados Unidos en ya, la segunda nación hispana del mundo. Y de hecho, la más rica y la más poderosa.

Al buen entendedor pocas palabras. Extrapolen Uds. y saquen las correspondientes moralejas.

Afectuosos saludos para todos mis dilectos amigos españoles.

Pedro Malo.