España

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El nacionalismo ¿Paranoia colectiva?

¡Ya estamos otra vez tokando los cojones! Si es que uno no puede descansar para preparar la “trilogy” boschiana: primero fue lo de Perejil y ahora esto de la bandera. Que quede claro: yo soy español, y me gusta mi pais, ¡pero esto es una farsa! ¿Pero que se cree ese tipo? ¿Por qué no se afeita el bigote que oculta su parálisis labial superior y se pone él una banderita de bigote? Esto del patriotismo es una mierda; pero ojo, intelectualoides, el once de septiembre (el catalán, se entiende, no el de “hijoeputaesei”) es otra farsa. No os creáis, separatas, que hay nacionalismos buenos. Como dijo un intelectual, el nacionalismo es el embrión del fascismo, y eso es verdad. Lo triste de los nacionalismos es que primero necesitan crearse un escenario de subsistencia histórica, y para eso hechan mano de la historia y se montan las movidas más estúpidas que uno se puede imaginar: que si el héroe tal luchó por no se qué, que si la sangre derramada... los nacionalismos son los peores historiadores, manipulan los hechos para poder crear una situación cómoda en el presente. Todos son iguales: el patrio-español, y los separatas butiguer-catalán y fascio-vasco. Si esta peña tuvieran un poco de rigurosidad histórica se les caería la cara de vergüenza. Y claro, no cortos con manipular la historia, pues se crean enemigos a veces de la nada. Porque claro, si no hubiera enemigos no tendría sentido esa lucha que se exige al pueblo, asi que venga a crear rencores y odios donde casi nunca existen. Que si Madrid-Barcelona, que si los Españoles nos atakan, y claro también tienen que ser mejores o superiores, porque si fueran iguales a los otros perdería sentido esa necesidad de diferenciación del otro. O sea, todo está podrido en el nacionalismo. ¡Que dejen en paz vivir a la gente y que nos dejen luchar contra los verdaderos problemas de la vida!

Pero vamos a hacer una breve introducción a esta patria llamada España y sus nacionalismos más importantes: el vasco, el catalán y el patrio-español.

LOS VASCOS

Ahora nuestros colegas vascos del PollaV y los de la “bata” se quieren separatear, me parece muy bien; pero tios, para las buenas y las maduras. Ahora que las cosas van mal me voy porque sí. Eso sí, en la colonización de América, como había pasta, todos los vascos a tripular los barcos y chupar de los indios tanto como los castellanos. Como Juan de la Kotza, que iba con Colón o Lope de Aguirre, Elkano, etcétera. Entonces sí que os apuntábais al carro. Y tú, Arzalluz, excura y señor sospechoso que sólo haces que crear odios, ¿qué pasa con tu papá que luchó en el bando nacional? ¿Cómo se vende eso? Pero ojo, igual que el Aznar, que todo el mundo sabe en qué lado estuvo su papá, ¡todos son iguales en el fondo! ¿Y qué harán cuando se “separateen” con los vascos que forman parte de nuestro patrimonio cultural colectivo, como Unamuno, Pío Baroja, Francisco de Vitoria, San Ignacio de Loyola, Zuloaga, Legazpi, Ramiro de Maeztu, Oquendo, Churruca, López de Ayala, Alonso de Ercilla, Samaniego, Antonio de Trueba, etcétera? ¿Los borrarán de la historia como con su verdadero pasado? Y que no me vengan con el cuento del Rh+ que me pongo a temblar, ¡lo que podría pasar si eso se pone de moda! O del royo de que el pueblo vasco resistió a los romanos; eso no se lo cree nadie, si hubiera habido oro por tierras vascas o hubiera sido estratégica esa zona, los romanos les habrían dado de ostias y se hubiera acabado el cachondeo, como les paso a los colegas cántabros y astures, que acabaron muchos muriendo en de las minas de oro leonesas, después de que fueron derrotados por Augusto (¿el hijo de Julius Caesar Augustus?).

Qué pena que en una comunidad que forma parte de la historia de España, por culpa de políticos nacionalistas enfermizos como Fascioarzalluz, o Francoznar, la gente se dé ostias. El pueblo vasco ha trabajado en equipo para lo bueno y lo malo dentro de España desde hace más de 600 años, y ya sé que sufrieron la guerra civil, pero también muchos castellanos, murcianos, andaluces, etcétera, que eran rojos, la sufrieron siendo fusilados, o en campos de concentración nazis o franquistas, trabajando como esclavos para hacer embalses o construyendo el Valle de los “Golpistas”.

El otro nacionalismo fascista vasco, y mucho peor, es el de los de la “bata”, que son una continuación política de un grupúsculo que se escindió por los años 30 del PNV llamado Acción Nacionalista Vasca. Esconde un problema esquizoide grave, su necesidad de mantener contínuamente un estado de sitio me resulta sospechosa. Tienen miedo, porque saben los jefes de arriba, que esos sí son enfermos mentales, que un estado de desquiciamiento y conflicto social es muy difícil de mantener si no se presiona contínuamente a la sociedad. La gente normal vasca (y muchos votan a los de la “bata”) como todo ser humano tiene sus sentimientos de arraigo a la tierra y su romanticismo, y si se les sabe apretar en la neurona adecuada, y eso los desquiciados mentales lo saben hacer muy bien (y si no mirad los líderes de las sectas), pueden conseguir que la enfermedad mental de los líderes se convierta en una cosa normal en la colectividad (y si no mirad los nazis con su pueblo). Pero eso si no se mantiene, acaba desapareciendo y la gente dándose cuenta de que hay cosas más importantes en la vida que matar por un Rh+ diferente. ¿Y sabes qué pasaría con los “batosos”? Que tendrían que hacer un tratamiento psiquiatrico para aprender a vivir en sociedad.

El pueblo vasco se merece que se respete su lengua y su cultura y se promueva su uso y normalización. Hace 60 o 70 años en los pueblecitos y pequeñas comunidades rurales el vasco era la lengua vehicular y su cultura se mantenía íntegra. La guerra civil, la crisis rural y la inmigración han hecho que el pueblo vasco esté en un punto de difícil posición tanto lingüísticamente como socialmente. La presión de la cultura Española y YankoAmericana hace que esté en crisis, pero no creo que con los conflictos fanático-esquizoides se solucionen las cosas. España es un país maduro que ha sabido ver sus errores y ha intentado arreglarlos, y la creación de la comunidad vasca fue buen paso. Y no creo que con movidas separatas se arreglen los verdaderos problemas vascos, que son: la pérdida de identidad (debida a una crisis interna, más que externa), los contratos basura, la globalización, la recuperación de los derechos humanos de todos los vascos, la destrucción de la naturaleza, etcétera. ¡GORA EUSKADI!

LOS CATALANES

El separatismo catalán es mas bonachón, es lo que se conoce como “botigueronacionalista”. Es más tranquilo y negociador, y si las pelas no cuadran pues saben guardarse su nacionalismo para mejores momentos. También hubo catalanes en América desde el principio. Bartolomé de las Casas, que en verdad se llamaba Bartomeu de Casaus y era de los de Montserrat, fue en el segundo viaje de Colón a chupar del bote. Pero ese no quería pasta, sino almas a lo Escrivá de Balaguer. Por ahí hay también un libro en plan polémica que intenta demostrar que en los primeros dibujos que hay en libros del Descubrimiento (que ya se ha demostrado que lo de Colón fue un montaje; os recomiendo la lectura de “Ýfrica versus América” de la Duquesa de Medina Sidonea) de aquellas épocas podemos encontrar que algunas de las carabelas llevaban la bandera catalana, pero que luego la censura de aquella época, en las siguientes impresiones, la cambió por la de Castilla. Los catalanes no tienen tanta historia como los vascos, que como mínimo tienen unos 3000 años; aunque quizás en verdad formen parte del antiguo tronco de los celtíberos, y su lengua no sea más que eso: lo que queda de una lengua común en España (sería la ostia, desaparecería el royo separata vasco en un segundo si algún paleolinguista confirmara claramente esta teoría). Centrándonos en los “boti”, eso de los 1000 años de historia que por ahí se repite obstinadamente queda muy bien como número exacto, pero dudo que al guifredo “el Pilos” ese, a parte de irle el royo conquistas, le importara mucho el tema catalán. Él iba a conquistar tierras y cobrar impuestos, y a vivir la vida. ¡Pero ahora le han puesto el san Benito de Padre de la patria! Pero bueno, adoptaremos eso como referencia. El pueblo catalán siempre ha tenido una mezcla consanguínea, así que el tema RH+ y sus peligros no podrían ocurrir. Racialmente el pueblo catalán es una “barrecha” de muchos pueblos, y ahora más con la inmigración de pueblos de toda España. El catalán cada vez más es un individuo que sabe trasmitir a las personas que llegan su lengua y su cultura no sanguínea sino interpersonal, y sabe incorporar y enriquecer con inteligencia su propia cultura, con elementos llegados de otros sitios, sin perder su propia identidad. A nivel más separata están los colegas de ERC: buena gente, pero van un poco perdidos; y los chapuzas de los Maulets, que también van más mal que un gipi después de fumarse un porro. ¡VISCA CATALUNYA!

EL PATRIO-ESPAÑOL

El nacionalismo español es impresentable porque nunca ha sabido integrar la realidad española, sino que como otros nacionalismos se ha inventado una realidad no muy veraz y se ha inventado héroes y patriotas a punta pala. La época más cruda del nacionalismo español fue después de la guerra civil, que no fue una lucha patriótica nacional solamente, sino que defendía también los valores tradicionales cristianos, la filosofia de Jose Antonio totalmente anticapitalista y anticomunista (algo así como una tercera vía). Pero lo peor que nos dejó es la pérdida de las libertades de los españoles y de las comunidades catalanas y vasca, creadas en la República. Si no ahora esto de los nacionalismos catalanes y vascos no existiría (aunque no nos hemos de olvidar que en el bando nacional hubo muchos vascos y catalanes). El nacionalismo patrioespañol se basa en una Patria única y monolingue. Ideal totalmente estúpido y antihistorico. Está bastante deshinchada ya que no tiene muchos simpatizantes, aunque de vez en cuando salen tildes sospechosos. Aunque como dije antes, sentirse español no tiene por qué significar ser patrioespañol. España es un país con diversas culturas y lenguas, pero de eso al tema país de naciones hay mucha distancia. Suiza, Bélgica, ”Hijoeputaesei”, Perú, Holanda, Francia, Canadá, Sudáfrica y un largo etcétera comparten culturas e idiomas diversos, y por eso no se tienen que “separatear”. Los países son como los matrimonios: si se habla se pueden arreglar las cosas. ¡VIVA ESPAÑA!

Los nacionalismos, como la tele, no son más que un arma más de manipulación colectiva y los usan los políticos para sus intereses. El individuo, a veces desorientado políticamente, confunde nacionalismo con sentimiento de arraigo, que es más personal y profundo, y cree que son lo mismo. El sentimiento de arraigo es algo que cada uno tiene, y se adquiere con el desarrollo emocional. La lengua, los olores, los recuerdos, crean una base sobre la que luego se desenvuelven nuestros pensamientos e ideas, y es sobre el que se cimenta nuestra personalidad. Los políticos fakciosos saben eso y juegan con nosotros, saben que con eso nos pueden dirigir y hacernos olvidar los verdaderos problemas que nos rodean. Tenemos que tener mucho cuidado porque pocas veces detrás de los nacionalismos hay algo bueno para el individuo. Quizás sí para los empresarios o para los políticos fasciosos, pero no para la gente normal. Tenemos que aprender a leer entre líneas esos mensajes patrióticos porque muchas veces detrás de eso hay una clara manipulación.

DEDICADO A TODAS LAS PERSONAS QUE TIENEN UN PARIENTE ASESINADO POR ESOS FASCISTAS DE ETA, ESPECIALMENTE A XAVI ALBERO, AMIGO MÝO, QUE NUNCA CONOCIÓ A SU PADRE PORQUE LO ASESINARON ESOS

Gran pagina web, delirante e interesante.