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Entre pillos anda el juego
Enviado por el día 22 de Septiembre de 2006 a las 06:29
Entre pillos anda el juego
Cuando una sociedad, grupo, corporación, etc. etc. deciden elaborar un proyecto que les va a beneficiar a todos en alguna medida, pero basado en actuar al margen de las leyes vigentes, o de una forma solapada, eso se llama: MAFIA
Y una especie de mafia es lo que está viviendo la política española, puesto que si la mayoría del Parlamento Español, deciden poner trabas a que se investiguen los hechos más graves que se han producido en la democracia, sin llegar a aclararlos totalmente para que no queden sombras, dudas ni sospechas sobre la clase política, es evidente que no les interesa hacerlo.
¿Las razones? No hace falta emular a la ardilla para darse cuenta que lo que pretende el PSOE es crear un régimen en España basado exclusivamente en sus conceptos sociales, eludiendo otras legítimas opciones, las cuales desprecia y pretende arrinconar de una forma realmente mezquina. Actitud propia de tiranos, reyezuelos y dictadores.
La trayectoria del PSOE en los últimos 30 años de la historia de España ha estado plagado de hechos más propios de mafiosos que de políticos honestos. Desde “mister equis” hasta el más desconocido concejal de ayuntamiento han confeccionado un rosario de pillerías y corrupciones que están la mayoría al cabo de la calle, y muchas en los juzgados con sus sentencias correspondiente.
Este es el panorama nacional. Lo que toda la vida se ha considerado lo que es la dignidad y la decencia, ha quedado obsoleto; ahora lo que se lleva es “el pelotazo” y “meter la mano” en la caja de forma descarada. La prueba la tenemos en Marbella, ya están sueltos los que han esquilmado la misma dejando sólo telarañas.
Pero lo realmente sorprendente, es que al ciudadano “señor izquierdo”, no le importa este estado de cosas, incluso creo que las admira y las envidia. Que con sus impuestos se enriquezcan los políticos en una o dos legislaturas es plausible, aunque para él toda una vida laboral sólo le sirva para conseguir una pensioncita que le permita vivir con lo justito.
Si la mayoría de los españoles, aceptan esta situación como normal, si siguen dando su confianza a los que se sirven ellos mismos antes de servir a los ciudadanos, comprenderé el dicho de que cada pueblo tiene el gobierno que se merece. Con razón decía Rubalcaba, el paradigma de la decencia, la verdad y la honradez...
“No nos merecemos un gobierno que nos mienta”
Cuando una sociedad, grupo, corporación, etc. etc. deciden elaborar un proyecto que les va a beneficiar a todos en alguna medida, pero basado en actuar al margen de las leyes vigentes, o de una forma solapada, eso se llama: MAFIA
Y una especie de mafia es lo que está viviendo la política española, puesto que si la mayoría del Parlamento Español, deciden poner trabas a que se investiguen los hechos más graves que se han producido en la democracia, sin llegar a aclararlos totalmente para que no queden sombras, dudas ni sospechas sobre la clase política, es evidente que no les interesa hacerlo.
¿Las razones? No hace falta emular a la ardilla para darse cuenta que lo que pretende el PSOE es crear un régimen en España basado exclusivamente en sus conceptos sociales, eludiendo otras legítimas opciones, las cuales desprecia y pretende arrinconar de una forma realmente mezquina. Actitud propia de tiranos, reyezuelos y dictadores.
La trayectoria del PSOE en los últimos 30 años de la historia de España ha estado plagado de hechos más propios de mafiosos que de políticos honestos. Desde “mister equis” hasta el más desconocido concejal de ayuntamiento han confeccionado un rosario de pillerías y corrupciones que están la mayoría al cabo de la calle, y muchas en los juzgados con sus sentencias correspondiente.
Este es el panorama nacional. Lo que toda la vida se ha considerado lo que es la dignidad y la decencia, ha quedado obsoleto; ahora lo que se lleva es “el pelotazo” y “meter la mano” en la caja de forma descarada. La prueba la tenemos en Marbella, ya están sueltos los que han esquilmado la misma dejando sólo telarañas.
Pero lo realmente sorprendente, es que al ciudadano “señor izquierdo”, no le importa este estado de cosas, incluso creo que las admira y las envidia. Que con sus impuestos se enriquezcan los políticos en una o dos legislaturas es plausible, aunque para él toda una vida laboral sólo le sirva para conseguir una pensioncita que le permita vivir con lo justito.
Si la mayoría de los españoles, aceptan esta situación como normal, si siguen dando su confianza a los que se sirven ellos mismos antes de servir a los ciudadanos, comprenderé el dicho de que cada pueblo tiene el gobierno que se merece. Con razón decía Rubalcaba, el paradigma de la decencia, la verdad y la honradez...
“No nos merecemos un gobierno que nos mienta”