España

Aznar fue un buen presidente del Gobierno en sus dos mandatos e hizo prosperar a España en todos los órdenes, pero cuando se pone a filosofar y hablar como " estadista " es un típico representante de la peor derecha española.

Decir que " los musulmanes tampoco han pedido perdón por la ocupación de España durante ocho siglos " es una afirmación asombrosa merecedora de las siguintes consideraciones:
- El cajón de sastre " musulamanes " versus " occidentales " es falso: la mayor parte de los musulmanes son occidentales puesto que viven o aspiran a vivir de manera similar a la nuestra, en Estados democráticos y de Derecho, laicos y con libertades y derechos civiles y políticos. Añádase el hecho de que no existe " occidente " sino países respetuosos de los derechos humanos en marcos de sociedades llamados anteriormente " burguesas " y países gobernados por una amplia gama de tiranías.
- Al contraponer " musulmanes " contra " occidentales " está identificando a los primeros con los f.ollacabras islamistas de toda laya y jaez que apestan el mundo, lo que es una ofensa gratuita e incluso xenofóbica. Una estupidez, una ofensa que además, como veremos es gratuita y que consigue lo contrario a lo que busca.
- Al identificar los musulmanes con los f.ollacabras en tan burda y cretina generalización, está concediendo LEGITIMIDAD a tales f.ollacabras, singularmente a los muy bestias y totalitarios de Al Quaida, la representación de 1000 millones de musulmanes, lo que cualquier manual de política antiterrorista básico afirma que es un error.
El salvajismo y la brutalidad dialéctica de tal afirmación se hace claro cuando se piensa, por un instante en que JAMÝS ningún político español se ha permitido el lujo de equiparar a TODOS los vascos con los f-ollacabras patrios etarras, porque eso, además de injusto, habría sido contraproducente.
- La ignorancia de Aznar se extiende, asimismo, al hecho, de que la mayoría de los españoles durante gran parte de la Reconquista fueron musulmanes y que por supuesto eran españoles ( o hispanos ) tanto o más que los cristianos. De las palabras de Aznar se desprende, además, que él piensa que España es un ser vivo que, ONTOLÓGICAMENTE, es cristiano, con más o menos meandros históricos ( historicistas )y que son sólo aberraciones de su historia las épocas en las que no es católica.

He votado a Aznar alguna vez en la esperanza de que ayudándole a aliarse con la derecha anglosajona, americana, pudiera liberarse alguna vez la derecha española de su pelo de la dehesa fascista, antañón, carca. El roce hace mucho, pero los tics fascistas, el regocijo fascista, xenofóbico que causan sus declaraciones en el cuerpo mayoritario del cabestraje derechista patrio ( tan similar por otra parte al cabestraje plogle español )me hacen perder toda esperanza.