España
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¿Se deben poner límites a las independencias?
Enviado por el día 25 de Octubre de 2004 a las 23:49
¿Se deben poner límites a las independencias?
Parece evidente que la unión de todos los españoles es una realidad imposible desde un sistema democrático, por lo que parece irremediable que en un futuro próximo el nombre de España con nación soberana desaparezca del mapamundi como desapareció Yugoslavia, dando paso a una serie de estados independientes y soberanos.
¡Bien! De una forma civilizada y sin traumas se ha liquidado una nación soberana que existió como tal durante siglos, para configurar la Península Ibérica en un mapa que satisfaga todas las nacionalidades. ¡Ya está! Parece muy fácil. ¿verdad?
No es tan fácil. ¿Qué se hace con los partidarios de una España unida? ¿Cuántos son? ¿Qué se hacen con ellos? ¿Sabemos cuantos catalanes, vascos, gallegos, andaluces y demás comunidades desean dejar de ser españoles? ¿Aceptarían el cien por cien de los catalanes dejar de ser españoles? ¿Y de los vascos? ¿Saldría de esta disgregación una unión fuerte de todos los pueblos escindidos? ¿O por el contrario se suscitarían independentistas de las independencias? ¿Se podrían poner coto a las independencias, tú si, tú no? Contemplaría el País Vasco la disidencia de Araba, o la sometería a sus dominios? ¿Tienen todos los pueblos de la antigua España el mismo derecho para disgregarse? ¿Reclamarían algunos, derechos históricos para anexionarse territorios no agregados hoy? ¿Se producirían disconformidades en el reparto de los territorios a anexionar en el nuevo estado? ¿Se configurarían los cinco, diez, quince o los estados que resulten de una forma pacífica y equitativa? ¿La relaciones diplomáticas serían las correctas? ¿Se establecerían fronteras entre los estados que así lo consideren oportuno? ¿La unión europea admitiría como socios a todos los estados ibéricos? ¿Se producirían hostilidades entre los estados recién creados? ¿Se dejarían a su suerte las plazas de Ceuta y Melilla? ¿Se formarán repúblicas democráticas, reinos, dictaduras?
Quizás sea imposible unir España en un estado fuerte y soberano orgullo de todos sus habitantes, pero más imposible es satisfacer a 45 millones de habitantes en un proyecto que puede llevar a la insolidaridad y al caos a la mayoría de ellos.
Parece evidente que la unión de todos los españoles es una realidad imposible desde un sistema democrático, por lo que parece irremediable que en un futuro próximo el nombre de España con nación soberana desaparezca del mapamundi como desapareció Yugoslavia, dando paso a una serie de estados independientes y soberanos.
¡Bien! De una forma civilizada y sin traumas se ha liquidado una nación soberana que existió como tal durante siglos, para configurar la Península Ibérica en un mapa que satisfaga todas las nacionalidades. ¡Ya está! Parece muy fácil. ¿verdad?
No es tan fácil. ¿Qué se hace con los partidarios de una España unida? ¿Cuántos son? ¿Qué se hacen con ellos? ¿Sabemos cuantos catalanes, vascos, gallegos, andaluces y demás comunidades desean dejar de ser españoles? ¿Aceptarían el cien por cien de los catalanes dejar de ser españoles? ¿Y de los vascos? ¿Saldría de esta disgregación una unión fuerte de todos los pueblos escindidos? ¿O por el contrario se suscitarían independentistas de las independencias? ¿Se podrían poner coto a las independencias, tú si, tú no? Contemplaría el País Vasco la disidencia de Araba, o la sometería a sus dominios? ¿Tienen todos los pueblos de la antigua España el mismo derecho para disgregarse? ¿Reclamarían algunos, derechos históricos para anexionarse territorios no agregados hoy? ¿Se producirían disconformidades en el reparto de los territorios a anexionar en el nuevo estado? ¿Se configurarían los cinco, diez, quince o los estados que resulten de una forma pacífica y equitativa? ¿La relaciones diplomáticas serían las correctas? ¿Se establecerían fronteras entre los estados que así lo consideren oportuno? ¿La unión europea admitiría como socios a todos los estados ibéricos? ¿Se producirían hostilidades entre los estados recién creados? ¿Se dejarían a su suerte las plazas de Ceuta y Melilla? ¿Se formarán repúblicas democráticas, reinos, dictaduras?
Quizás sea imposible unir España en un estado fuerte y soberano orgullo de todos sus habitantes, pero más imposible es satisfacer a 45 millones de habitantes en un proyecto que puede llevar a la insolidaridad y al caos a la mayoría de ellos.