Hispanoamérica
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Siempre igual ,nada cambia...
Enviado por el día 17 de Octubre de 2006 a las 23:00
Todo esto demuestra que, una vez más, una parte de la dirigencia política argentina está recurriendo al viejo sistema de enfrentar a la sociedad diciendo que la pobreza de unos es el resultado de la riqueza de otros. Son incapaces de ver a la economía como un sistema de cooperación pacífica y voluntaria. Para los progres y populistas, el sistema económico necesariamente lleva a un enfrentamiento entre compradores y vendedores, entre empresarios y trabajadores, entre funcionarios públicos “benévolos” y contribuyentes “egoístas”. Para ellos, todo es enfrentamiento, odios, resentimientos. Es como si no pudieran vivir un momento sin generar algún tipo de conflicto dentro de la sociedad. Las peleas entre argentinos son, para ellos, como al aire que respiran. Si no consiguen que haya enfrentamientos entre diferentes sectores, los inventan porque no pueden respirar sin la existencia de un conflicto.
En la cabeza de los progres y populistas no cabe la idea de pensar que en todo intercambio ambas partes ganan. El que vende porque valora más el dinero que recibe que la mercadería que entrega, y el que compra porque valora más la mercadería que recibe que el dinero que entrega. Esta posibilidad de cooperación pacífica y voluntaria es impensable para progres y populistas, con lo cual le hacen un terrible daño al país y a su gente, pero, particularmente, a los sectores más humildes de la sociedad. El ejemplo más claro se ve en el mercado de créditos.
En efecto, en nuestro país hay una larga tradición por la cual el que debe dinero es una víctima y el que presta es un criminal. Esta visión ha llevado a que, por lo menos en los últimos 30 años, quienes tomaron dinero prestado siempre salieran ganando. En 1975, cuando se produjo el Rodrigazo, quienes debían pesos terminaron pagando monedas y quienes tenían que cobrar sus créditos vieron licuados sus activos. En 1982, se estatizó la deuda privada. En 1989, la hiperinflación licuó deudas en forma fenomenal y, en 2002, la pesificación a costa de los ahorristas fue el invento de Duhalde. ¿Qué se ha conseguido con esta política? Además de generar impresionantes transferencias patrimoniales, el resultado fue la evaporación el mercado de capitales. La gente no ahorra en la Argentina porque sabe que, en algún momento, sus ahorros serán confiscados para beneficiar a los deudores. El resultado es que hoy no existen créditos a largo plazo a tasas pagables. No hay un mercado de capitales que financie la inversión y todos sabemos que sin crédito de largo plazo es imposible sostener el crecimiento. Esta idea de creer que el que debe es víctima y el que presta es un salvaje lo único que ha conseguido es que los argentinos ahorren en el exterior, financiando la inversión y el consumo de los países desarrollados
Sigue en...
http://www.atlas.org.ar/articulos/articulos.asp?Id...
En la cabeza de los progres y populistas no cabe la idea de pensar que en todo intercambio ambas partes ganan. El que vende porque valora más el dinero que recibe que la mercadería que entrega, y el que compra porque valora más la mercadería que recibe que el dinero que entrega. Esta posibilidad de cooperación pacífica y voluntaria es impensable para progres y populistas, con lo cual le hacen un terrible daño al país y a su gente, pero, particularmente, a los sectores más humildes de la sociedad. El ejemplo más claro se ve en el mercado de créditos.
En efecto, en nuestro país hay una larga tradición por la cual el que debe dinero es una víctima y el que presta es un criminal. Esta visión ha llevado a que, por lo menos en los últimos 30 años, quienes tomaron dinero prestado siempre salieran ganando. En 1975, cuando se produjo el Rodrigazo, quienes debían pesos terminaron pagando monedas y quienes tenían que cobrar sus créditos vieron licuados sus activos. En 1982, se estatizó la deuda privada. En 1989, la hiperinflación licuó deudas en forma fenomenal y, en 2002, la pesificación a costa de los ahorristas fue el invento de Duhalde. ¿Qué se ha conseguido con esta política? Además de generar impresionantes transferencias patrimoniales, el resultado fue la evaporación el mercado de capitales. La gente no ahorra en la Argentina porque sabe que, en algún momento, sus ahorros serán confiscados para beneficiar a los deudores. El resultado es que hoy no existen créditos a largo plazo a tasas pagables. No hay un mercado de capitales que financie la inversión y todos sabemos que sin crédito de largo plazo es imposible sostener el crecimiento. Esta idea de creer que el que debe es víctima y el que presta es un salvaje lo único que ha conseguido es que los argentinos ahorren en el exterior, financiando la inversión y el consumo de los países desarrollados
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Re: Siempre igual ,nada cambia...
Enviado por el día 17 de Octubre de 2006 a las 23:19
Y, es la historia de siempre. Los progres viven quejándose, por ejemplo, de la libre competencia, pero son ellos los que proponen el sometimiento y la coacción. Se quejan de que en los intercambios siempre hay alguien que gana, pero en las sociedades que proponen uno solo puede obtener algo del Estado, que es el que gana siempre.