Internacional
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Re: Ana y Joseph
Enviado por el día 9 de Junio de 2006 a las 15:31
Bueno, la diplomacia vaticana siempre ha funcionado bien, nadando y guardando la ropa. No es cuestión de personalizar. Qué importa uno u otro. El papa está muy por debajo de esa milenaria institución. la iglesia católica hubiera sobrevivido en cualquier caso.
Re: Re: Ana y Joseph
Enviado por el día 9 de Junio de 2006 a las 16:53
yo conozco un viejo que peleo en las SS porque en 1944 estaba en un orfanato, porque sus padres habian muerto en un ataque de los aliados, y un dia llegaron unos oficiales de la SS, le dieron uniformes a la mitad de los huerfanos y les dijeron "a pelear"....
Verdaderamente un nazi sanguinario, no?...
Yo pense que para el progerio subnormal de Moro, los niños-soldado eran victimas, no victimarios......
Verdaderamente un nazi sanguinario, no?...
Yo pense que para el progerio subnormal de Moro, los niños-soldado eran victimas, no victimarios......
Re: Re: Re: Ana y Joseph
Enviado por el día 9 de Junio de 2006 a las 17:26
Michael Onfray: "El reciente viaje de Benedicto XVI a Auschwitz demuestra que Pío XII no tendría que avergonzase de su sucesor… Ana Frank tendría ahora la misma edad, con pocos meses de diferencia, que el Papa actual."
Fuente: http://www.humanite.fr/journal/2006-06-03/2006-06
Y sin duda sería Papisa, la niña del Diario-cuento, si dependiera de burros como Michael Onfray... al fin, que tanto un infante como el otro son ambos best sellers ejemplares del poder mediático y económico de los moishes.
Fuente: http://www.humanite.fr/journal/2006-06-03/2006-06
Y sin duda sería Papisa, la niña del Diario-cuento, si dependiera de burros como Michael Onfray... al fin, que tanto un infante como el otro son ambos best sellers ejemplares del poder mediático y económico de los moishes.
Re: Re: Re: Re: Ana y Joseph
Enviado por el día 9 de Junio de 2006 a las 22:04
"Recordemos que Pío XII firmó un concordato con el nazismo; que el Vaticano jamás puso Mein Kampf en el Ýndice, lo que sí hizo con Montaigne, Descartes, Sartre, Bergson y muchísimos otros; que no se excomulgó a ningún nazi por pertenecer a una ideología criminal -al revés que los comunistas, que fueron anatematizados en bloque-, que el Vaticano permitió, con sus pasaportes diplomáticos la evasión de criminales de guerra a través de los monasterios alemanes, suizos e italianos, sustrayéndolos a la acción de la justicia; Hitler podía ser pagano, pero como buen deísta, no estaba en contra del cristianismo; en su libro elogia a Jesús cuando expulsa a los vendedores del templo –judíos-, y celebra la preponderancia del imperio cristiano; sus militares lucían en el cinturón un eslogan nada ateo: “Dios está con nosotros” en clara confrontación con la estrella amarilla y el triángulo morado o rosa que estigmatizaba a los judíos, testigos de Jehová u homosexuales. Nunca utilizó signos para identificar a los cristianos, que jamás fueron perseguidos como tales, etc."
Gulp...
Gulp...
Re: Re: Re: Re: Re: Re: Ana y Joseph
Enviado por el día 10 de Junio de 2006 a las 03:44
Ana Frank no existió, es otro cuento moishe como el "holocuento". Saludos, yagruma.
P.D.: ¿vieron?, los zurdelli como moro suscriben el mito igual que los libermoishes derechosos.
P.D.: ¿vieron?, los zurdelli como moro suscriben el mito igual que los libermoishes derechosos.
Re: Re: Re: Re: Re: Re: Re: Ana y Joseph
Enviado por el día 10 de Junio de 2006 a las 10:29
El "holocuento"?
Hombre, antes Europa estaba llena de judíos y en el 45 nos dimos cuenta de que faltaban unos cuantos y nadie sabía donde estaban, en fin...
Hombre, antes Europa estaba llena de judíos y en el 45 nos dimos cuenta de que faltaban unos cuantos y nadie sabía donde estaban, en fin...
Re: Re: Re: Re: Re: Re: Re: Re: Ana y Joseph
Enviado por el día 10 de Junio de 2006 a las 11:05
El "holocuento" no lo llevaron a cabo solo los alemanes. Anda que los rusos no se quedaron cortos. Y por toda Europa. Cuando la Wehrmacht llegó a cierto pueblo de Lituania, sus vecinos se sintieron libres de librarse de sus judíos. Mientras los iban cazando uno a uno y eran llevados a la plaza del pueblo, un "campeón" local les iba abriendo el craneo con un martillo pilón. Al final de la "dura" jornada, y sobre la pila de cientos de cadáveres, el tipo cambió el martillo por un acordeón y cantó canciones populares mientras los demás bailaban.
Y los soldados alemanes flipando en colores.
Y los soldados alemanes flipando en colores.