Internacional

La mayoría de israelíes tampoco condena el estado de guerra, incluso aquellos que se opusieron a la invasión de 1982 y que actualemente se oponen a la ocupación de Gaza; entienden la naturaleza del conflicto.
La verdadera guerra hoy no es en absoluto entre Beirut y Haifa sino entre una coalición de naciones que aspiran a lograr la paz: Israel, el Líbano, Egipto, Jordania, y Arabia Saudita por un lado, y el fanatismo islámico, exacerbado por Irán y Siria, por el otro.
http://buscador.lanacion.com.ar/Nota.asp?nota_id=8...

¿leyeron los mensajes en el foro de estos muchachos libaneses? El norte del libano no solo parece estar a favor de Israel y en contra de Hezbolla, Siria e Irán, hay un odio creciente hacia Europa, EEUU y todos los grupos que no soporta la lucha contra Hezbola.
Es algo que uno imagina que sucede, pero cuando lo lee directamente impacta. Mejor que los bolivarianos en lugar de preocuparse por los enemigos que se ganan USA o Israel bombardeando terroristas empiencen a preguntarse cuantos millones de de enemigos se ganan ellos aparando y apoyando a esos terroristas. No creo que Chavez sea tan popular entre los miles de jovenes iranies reprimidos por el regimen en los pasados meses como lo es entre la estudiantina calienta-asiento de las universidades porteñas, ni hablemos del cariño que le deben tener en Cuba.

Los libaneses cristianos son los auténticos libaneses que tienen una cuenta pendiente con los musulmanes palestinos que se afincaron por orden de arafat en el sur del libano destrozando así el país...

No se puede apoyar a Hamás, que pide un alto el fuego y una negociación (http://www.eluniversal.com.mx/notas/363969.html), y a la vez apoyar a Hizbulá.
Ahora el gobierno del Líbano pide un alto el fuego, no se sabe si a petición o sólo con autorización de Hizbulá, que es el representante oficioso de Siria en el Líbano desde que los libaneses y la ONU echaron a los sirios de allí. El gobierno del Líbano pide ahora un alto el fuego, por medio de su presidente a quien el fascismo sirio colocó allí… porque el hecho de que a Siria la haya venido financiando la URSS desde los 70, no implica que los fascistas se hayan convertido al comunismo; sólo evidencia que ambas cosas nunca dejaron de ser lo mismo: La pretensión de convertir a la gente en piezas de un sistema que se nutre de nacionalismo o cualquier otro concepto no tangible.
El nacionalismo fascista sirio viene desde que 100 millones de árabes se levantaron contra 6 millones y judíos, y Siria acabó perdiendo los Altos del Golán. Es sabido que para una nación perder un monte es como para una persona perder un dedo, y la especialidad de los fascistas es conseguir que cada habitante del país se sienta como si el dedo se lo hubieran quitado a él. Los fascistas de el Assad actuaron y el gobierno sirio lo pagó caro. El rencor y el deseo de venganza de los fascistas llegaron a Damasco. Y allí siguen instalados.
Ya se sabe que los fascistas son gente capaz de convencer a cientos de miles de adolescentes de la necesidad que existe de ir a dejarse matar en remotos lugares que no conocen, e instruyen a sus tropas en la virtud de depurar al máximo cualquier actividad intelectual, para que la única moral posible que le quede a los muchachos sea la propia que da la fe. Dicha fe es el deseo del fascista, aunque el fascista se sabe iluminado hasta el punto de argumentar que él sólo desea aquello porque se lo quiere entregar a Dios, o a la Nación, o al Mundo… nunca ningún fascista ha presumido de la necesidad de matar o morir por la economía de mercado.