De ese modo proyectan sus problemas en la sociedad, y ¿quién es la sociedad? ¡No hay tal cosa! Hay hombres y mujeres individuales, y hay familias. Y ningún gobierno puede hacer nada sino a través de la gente; y la gente debe mirarse a sí mismos en primer lugar.
Las amenazas al gobierno limitado no se acabaron con el colapso del comunismo y el descrédito del socialismo. Sigue siendo un tema de debate en las democracias occidentales, particularmente en las europeas. Hay una tendencia constante, de la que los grupos de presión y los medios de comunicación forman parte, a expandir el gobierno.